Círculo concéntrico, espiral de viento, huracán iracundo, ciclón enfurecido, furia de Éolo. Volteándose sobre mi vida hambrientos de carroña, sus uñas me clavan sedientos de venganza. Yo afilo mis dientes rasgo sus entrañas, ellos temen mi amanecer, y el certero sol que vendrá mañana.       Julia

 Polvo de estrellas, caos revertido, siglos de involución, aniquiladores de fauna, ávidos exterminadores, experimento del cosmos, humanos fallidos.        Julia

 Cuando el viento sopla, la vida me sabe a poco. Cuando me miras, la vida me sabe a poco. Cuando cae la lluvia, la vida me sabe a poco. Cuando el sol calienta, la vida me sabe a poco. Me sabe a poco la vida, si pudiera convertirla en sustancia gelatinosa, succionaría su esencia, lamería cada segundo los instantes, las horas... Porque la vida me sabe a poco, a tan poco......            Julia

 Llueve sobre la tierra, gotas tranquilas, cansadas, van resbalando por mi ventana, dejan suaves surcos en el cristal, caminos de su inevitable pasar. Llueve sobre la tierra en este frío y gris Marzo,  que, perezoso e indolente, dará ineludible paso a la primavera latente.               Julia

 Profunda la ausencia, autómatas sin rumbo, ansia de gloria, pena secuestrada, alegría forzada, los hilos que manejan títeres del mundo.        Julia

  En la primavera que acecha vi renacer lunas nuevas, tuve envidia del hilo recién tejido que, en manos del artesano, forma bonitos dibujos coloridos. También yo fui plenilunio y trama cromática multicolor, ahora en el transcurso de los años, ya el intenso brillo se apago. El pasar del tiempo fue tutor de mi presencia, enseñándome a sanar el alma que, en mi joven plenitud,  no supo como amarme, pero en la madurez  aprendió a quererme.                        Julia

  Tengo dos caras dualidad del alma, una sonríe por la mañana la otra es una descarada, mi sombra se mofa del mundo  el cuerpo teme el mañana, ojos se iluminan con esperanza  párpados oscurecen mi mirada. Tengo dos caras dualidad del alma, una es angelical y humana, la otra turbia y malvada.           Julia

 Tengo el cuerpo agrietado, células hambrientas, ávidas, de energía supletoria. Tengo las fuerzas exiguas esclavas de éste cansancio, toda yo rota en ínfimas partículas. Tengo lagrimas enquistadas en el ascenso de mi tráquea prisioneras de la férrea censura de mi garganta. Toda yo descosida, sin aguja ni remiendo que cierre y suture la esencia vital que voy perdiendo.      Julia

 Mandatarios de la tierra, guerreros de la avaricia, traficantes del odio, garrapatas del bosque, patógenos y virus de nuestro enfermo mundo.  Paso eterno el vuestro no será, ni bombas, ni tanques, ni fortuna, de la eterna muerte os salvara. Lodo en polvo mutarán los huesos,  que la tierra en convulsión vomitará en arcada titánica, al más oscuro inframundo.

 Sentir que el sol trae destellos de ilusión, cada mañana nace de las manos del amor. Si el miedo es compañero de un amanecer sin luz, también la esperanza  rasga el cielo sin temor. Amigos de toda la vida anidan en mi corazón, noche oscura y mañana limpia, el dolor sin compasión, alma de niña no olvidada, madurez sin admisión. Lentamente la vida va pasando, por angostas veredas voy despacio caminando, quién supiera dibujar  la certera desdicha, quién pudiera describir el color de la ilusión.          Julia